martes, 26 de julio de 2022

 


Tanto que agradecerte de nuevo, bendito Señor

Que todo lo puedes… Tantas cosas por pedirte…

Y tanto que agradecer a tantos, que bendecirte

No me basta… Que entregarte alma, vida y corazón

No me es suficiente… Que podría hacer o darte yo

Bendito Cristo de mis sueños… Como resarcirte

Tanto Amor como, sin merecerlo, quizás al peor

De tus hijos, le has dado.  Por esto, venerado Señor

Y dueño de mi vida, hoy quiero repartir Amor…

Que mejor regalo, a mi bendito Dios del Amor

Que en un día tan señalado, abrir el corazón

De par en par y desear a mis hermanos lo mejor…

Paz, trabajo, felicidad… Esperanza . Y como no,

Aunque me repita, esta antigua oración.

Ya que hoy por querer, quisiera

Que nuestro Señor me bendijera

Y Su Bendita Madre me concediera

Hacer realidad esta infantil quimera…

Solo te pido cuatro deseos, Señor…

El Primero, poder tener unos brazos

Tan fuertes, tan grandes y largos…

Que a ser posible, Señor

Fundiera en el mejor de mis abrazos

A todos y todas a los que tu Amor…

Eterno y Bendito Amor

Sin medida ni reparos

A lo largo de mi vida me obsequió,

Haciéndome quizá el mejor de los regalos.

Y también, ¿por qué no…?

A todos y a todas a los que no

He sabido encontrar el momento de amarlos…

El segundo deseo, Señor…

Tener grandes y fuertes manos.

Grandes y fuertes para hacer el mejor reparto…

Repartir Paz, Esperanza y cariño a mis hermanos,

Todo lo que de bueno albergue mi corazón

Para los que he amado,

Hoy amo, o amaré en un futuro lejano…

Y también, ¿por qué no…?

A todos y a todas a los que no

Me he sentido capaz de poder amarlos.

Y si pudiera ser que pudiera

El tercero, Señor…

Que Tu que todo lo puedes, me concedieras

La oportunidad de regalar de mí, lo mejor.

Mi mejor sonrisa, mi desmedida pasión…

Mis ánimos, mi mejor aliento… Y que sirviera

Para aliviar el llanto, la pena y el dolor

Que anida en el fondo del alma ajena.

Y de aquellos a cuantos quise, a los que querer quisiera

Y de aquellos por los hoy siento el mejor amor…

Y también, ¿por qué no…?

A todos y a todas a los que pudiendo haberlo hecho,

No haya sido capaz de conseguir dar aliento o consuelo.

Y el cuarto, Señor…

Hasta que mi alma y mi cuerpo encuentren descanso,

Poder pedir perdón a todos a cuantos

Sin desearlo, Ofendí, molesté, o hice algún daño

A lo largo de mi vida, en tantos y tantos años…

De la misma manera que yo perdono a cuantos

A mí me lo hicieron, me lo harán… O me lo hacen hogaño.

Y también, ¿por qué no…?

A todos y a todas a los que a pesar de intentarlo

No fui capaz de devolver más amor

Tras, después de alguna falta, haber sido perdonado.

Que nuestro Señor y Su Bendita Madre, bendigan cada uno de nuestros hogares y nuestras vidas siempre…

Mis mayores y mejores deseos de paz, amor y felicidad para todos.

No hay comentarios: