En un rincón de mi memoria...
Mi viejo barrio de San Bernardo.
En tus calles de adoquines toreros, transcurrió mi niñez...
Mi colegio... Mi familia... Mis amigos...
Tardes de partidos de futbol, cuando había que quitarse los zapatos
porque se rompían y eran los que únicos que había...
Allí comencé a descubrir junto a mi padre los trámites
costaleros y ésta bendita aficción que nos devora...
Gracias papá... Siempre y para siempre en mi memoria...
2 comentarios:
No sé si alegrarme o no, no sé si os habeis vuelto poetas o viejos, yo lo único que puedo decir es que te leeré, os leeré, y recordaré.
Hablando con tu hermano Emilio, me decía, y me alegra que al menos algunos lo reconozcan, que nuestra camada era algo especial y que no se repetirá.
De tu amigo, que ha sufrido, disfrutado, y que le has dado muchas "patas" los sabados en los Padres Blancos, un fuerte abrazo.
Heidi se me ha venido a la memoria, el dia que fuimos a pedirle trabajo al penitente barron,santi, tu y yo, ese Miercoles Santo, que tiempos te acuerdas.
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