lunes, 8 de agosto de 2022

 


Ay muchacha de mis amores primeros...

Sólo necesité un segundo para sentir

Que eras algo especial para mí.

Un segundo que ya se pierde en el recuerdo.

Una hora muchacha, me bastó para saber

Que ya por siempre te amaría... Sólo un día

Para saber que jamás te olvidaría...

Un día muchacha, que se pierde en el ayer.

Una sola palabra: Adiós... Para herirme en mis adentros

La tarde de un martes que llaman Santo...

Adiós amor... Y a soñar con un reencuentro

Que ya jamás consentirías a pesar de mi llanto...

Toda una juventud, para disfrutarte...

Toda una madurez, para amarte...

Un segundo para convencerme de un disparate...

Y después, toda una vejez para intentar olvidarte...

O una muerte para soñar que sueño... Para soñarte...

No hay comentarios: